Aire con sabor a libertad
como los días que se van volando sobre nuestras cabezas
como los pájaros que deciden no volar
como la mirada ahogada en un charco de incongruencia.
Cielo, lluvia, colibrí,
respira y mantente a la expectativa,
ni tu amor será eterno
ni los ecos pueden apagar el silencio
y la noche se hará cargo de los amantes
como quien intenta matar la sed.
Tejado rojizo,
humo de todos los colores,
lo lejano nos llama al vacío.
Como quien mira directo,
siempre,
hacia el sol.